Hoy Pido la palabra

Un día normal una amiga me reenvió un artículo de prensa notificando sobre la guerra en nuestro país y el supuesto conflicto interno que se avecinaba en medio. El artículo se detenía con lo positivo que es ser Colombiano en comparación al resto de países fronterizos, como resultado de nuestras grandes áreas metropolitanas...cuando lo leía tuve que detenerme en estas líneas, que de seguro no escribiría un colombiano enterado un poco del margen del espectáculo. Claro que me hubiera gustado más, muchísimo mas escuchar La voz la palabra de mi amiga y no la voz popular entredichas `por ideas sentimentales de humanidad, sino atender un ligero trazo de su vida, algo digno que merecía escucharse.

Hoy opino que en los medios hay mas conflicto que en la acción misma de la guerra, el juicio es mayor y la gente del exterior que a duras penas entiende el porque un pueblo ajusticia a un mortal sin piedad declarado terrorista, y no existen mediáticos de paz para su agravio... la verdad es que yo no quisiera opinar y dejar mejor mi voz en off. Declararme de una ve y para siempre anarquista silencioso. Como desde es fácil entender que hay bandos que hacen el bien y bandos que hacen el mal, que uno y otro son una fuerza generadora destructora y a la vez creadora de papeles usados por la naturaleza. Es maleficio o es beneficio habría que preguntarse ahora entonces, ya Emerson decía que con la guerra se afianza la humanidad del hombre. Pero Hablo de palabras profanas que no péndulo. Los que los que estamos adentro tampoco nos enteramos mucho del asunto y tal ves todo se resuma en ecuanimidad económica.
Así entonces los periódicos también llegan a ser bárbaros, amarillistas; columnistas empeñados en dar a conocer una realidad engañosa, a lo sumo de uno o dos ángulos simples, siendo le misma realidad una rica amalgama embrujosa de la realidad y del hombre. Y que si es sabido que nadie escribe tan mal como los defensores de ideologías que envejecen, que nadie ejerce su oficio con menos pulcritud y cuidado, que ellos mismos, es porque se luchan por una verdad exterior y no una la realidad interior al reflejo del peligroso estereotipo.
Un día de estos me levantaba y me dije, ¿soy yo!? No! consentí, me estaré acostumbrando ha mi desde hace algún tiempo??!. Un par de veces exprese que todo hombre, a veces todo pueblo y hasta todo hombre aislado, en vez de soñar con mentidas “responsabilidades” políticas, debiera reflexionar mas dentro de si, y hasta que punto, yo mismo, por errores, negligencias, y malos hábitos, tengo parte también en la guerra y en todos los demás males del mundo.
Tal vez ahora tres cuartos de mis compatriotas, ó del mundo sigan leyendo la clase de periódicos que hablan de la guerra, lean todas las mañanas y todas las noches sus ecos, sean trabajados, exhortados, excitados, y ya se vayan asiendo descontentos y malvados, para el objetivo y fin de todo esto otra ves. la guerra misma, próxima sin novedad que se será aun mas horrorosa que lo que ha sido esta ultima.
Y hoy tal ves no sirva de nada pensar, ni decir, ni escribir nada humano, sin tener sentido de dar buenas ideas dentro de la cabeza, para dos o tres hombres que hacen esto, hay día por día miles de periódicos, revistas, discursos, sesiones publicas y secretas que aspiran a lo contrario y lo consiguen. Ya por eso hoy no he de volver a ocuparme de la guerra ni los periódicos. ?y tu¿